La Junta General Ordinaria de Accionistas de Crèdit Andorrà ha aprobado esta tarde la gestión y las cuentas del ejercicio 2017, con un resultado de 50,1 millones de euros (que sitúa al Grupo como el primer banco de Andorra en beneficios) y un volumen de negocio de 16.266 millones, de los cuales más de 10.000 millones en operaciones en Andorra. Los resultados se ven reforzados por la solidez que aporta una elevada ratio de solvencia, que se sitúa en el 16,15% (más de seis puntos por encima del mínimo legal exigido, del 10%), y una ratio de liquidez del 61,02% (el mínimo legal es del 40%).
El presidente del Consejo de Administración, Antoni Pintat, ha resaltado "la fortaleza financiera de Crèdit Andorrà" y ha expresado que, en este contexto de cambio y reestructuración del sistema financiero internacional, "Crèdit Andorrà, como banco de referencia del país, continúa trabajando para garantizar el buen gobierno corporativo, asegurar los más altos requisitos de ética e integridad y velar por el seguimiento de los estándares de referencia en la materia, así como para preservar la confianza y la reputación del Grupo, a través de la calidad de los servicios al cliente, la innovación y transformación digital y la sostenibilidad a largo plazo".
En el marco de la Junta General Ordinaria de Accionistas, Josep Peralba, consejero delegado de Crèdit Andorrà, ha comunicado su decisión, presentada al Consejo de Administración el 12 de enero de 2018, de retirarse después de superar la edad de jubilación y, por tanto, dando por culminados los años de servicio al Banco. Francesc Xavier Cornella Castel, director general de Crèdit Andorrà, suma a su cargo el de consejero ejecutivo del Consejo de Administración, lo que le convierte en primer ejecutivo del Grupo Crèdit Andorrà.
