
Los principales índices del mercado bursátil estadounidense siguieron subiendo con renovado optimismo por la posibilidad de un acuerdo comercial entre Estados Unidos y China.
La semana, más breve en EE. UU. debido al festivo del lunes, había comenzado lenta por las noticias de que ambos países parecían tener dificultades para acordar una fecha para negociar en septiembre, pero todo empezó a mejorar a partir de entonces. El S&P 500 terminó la semana en +1,8 %, el Nasdaq se apuntó un +1,8 % y el Dow Jones, un +1,5%.
Los sectores energéticos (+2,6%) y de consumo discrecional (+2,6%) lideraron las alzas, mientras que la cola fue para los servicios (+0,4%) y el sector de salud (+0,7%) tradicionalmente más defensivos. Valores cíclicos como los semiconductores superaron la media de los índices más amplios. El rendimiento de los bonos del Tesoro terminó ligeramente más alto la semana pasada, al quedar el 10 años en el 1,56% y el 2 años en el 1,52%.
El mercado comenzó a recuperarse el miércoles con la noticia de que el gobierno de Hong Kong había retirado oficialmente la controvertida ley de extradición que había originado las recientes revueltas. El índice Hang Seng hongkonés ganó un 3,9% y provocó una recuperación del mercado estadounidense, ya que los inversores consideraron que el fin de los problemas en la antigua colonia británica permitiría al gobierno chino centrarse con más atención en las negociaciones comerciales.
El mercado recibió un fuerte impulso el jueves, cuando Estados Unidos y China acordaron una nueva ronda de conversaciones el mes que viene en Washington. Liu He, jefe negociador de la parte asiática, habló con el representante comercial americano, Robert Lighthizer, y con el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, para acordar el encuentro. Además, una agencia de noticias china con probables vínculos con el gobierno informó de que “habían aumentado las posibilidades de una solución entre ambas partes”, en relación con las negociaciones comerciales. Sin embargo, este sentimiento positivo se templó ante la mayor probabilidad de que, si hay progresos, sea por el efecto negativo que la guerra comercial está teniendo en los Estados Unidos. Cabe señalar que las conversaciones tendrán lugar tras el aumento del 25% al 30% (el 1 de octubre) de los aranceles impuestos a productos chinos por valor de 250.000 millones de USD.
En el Reino Unido, el primer ministro Boris Johnson comenzó la semana amenazando con una celebración electoral el 14 de octubre si el Parlamento aprobaba una ley que impidiera la posibilidad de un Brexit sin acuerdo. La cámara no se ha echado atrás, pero queda por ver si Johnson finalmente optará por las elecciones generales. Lo que sí hizo fue declarar que “prefería morir en una zanja” a solicitar a la Unión Europea una prórroga del Brexit.
El viernes, los mercados bursátiles norteamericanos tuvieron una ligera corrección tras la publicación de los datos de empleo de agosto. El informe mostró una ralentización en la contratación, con un aumento de 130.000 contratos no agrícolas en comparación con los 160.000 esperados. La tasa de desempleo permanece en el 3,7% (el valor previsto) y los salarios aumentaron un 0,4% durante el mes y un 3,2% interanual. Ambos datos superaron las expectativas de los analistas.
El calendario de la semana que viene incluye la publicación de los beneficios de Broadcom (AVGO) tras el cierre del mercado el jueves. En el frente económico esperamos la publicación el miércoles del índice de precios de producción y, el jueves, del índice de precios al consumo.