
Los mercados cerraron modestamente a la baja el viernes (-0,08%), lo que fue un cierre destacadamente fuerte en un día con un informe de empleo débil. Los mercados han perdonado a la economía norteamericana, puesto que una tormenta de inverno se ha llevado la culpa de los malos resultados. Goldman Sachs estima que el mal tiempo impactó negativamente en el informe de empleo, en 70.000.
No hay demasiados titulares frescos esta mañana y los futuros se mueven ligeramente hacia arriba con el futuro del S&P 500 subiendo un 0,07%. Los movimientos más interesantes están en el mercado energético y en el mercado de bonos. En relación con este último, el presidente de la Fed de Nueva York, William Dudley, dijo que sus comentarios sobre una “pausa” en las subidas de tipos cuando la Fed empiece a reducir su balance se pueden haber “malinterpretado”, ya que los comentarios de Dudley están causando que los tipos de interés a corto plazo reboten hacia arriba. En relación con lo primero, el crudo ha continuado con su marcado rebote y el WTI ha subido un 1% esta mañana, por encima de los 52 dólares/barril.
Mirando al resto de la semana, el jueves debería ser bastante importante, pues tendremos una primera ronda de los resultados empresariales del 1r trimestre, con varios de los grandes bancos (JP Morgan, Wells Fargo, Citigroup y PNC) presentando sus cifras. La reacción a estos informes podría marcar el tono de los mercados durante las dos próximas semanas, ya que los bancos lideraron el rally post-electoral hasta que se deshincharon en marzo, pues la curva de tipos se aplanó y el gobierno está tardando en reducir la regulación financiera.