
Los inversores tuvieron cierto alivio ayer, pues no hubo continuación de las correcciones del miércoles. Ni siquiera las noticias de un ataque terrorista en el Parlamento de Londres fueron suficientes para dar un vuelco al mercado. El S&P 500 cerró con una subida del 0,2%, mientras que el Nasdaq (con mucho peso en tecnología) subió un 0,5%. Esta mañana el mercado de futuros está relativamente plano, pues los inversores centran su atención en la próxima votación de la reforma sanitaria.
La votación de hoy será un importante indicador para el mercado. Si los Republicanos no logran que se apruebe su reforma en la Cámara de Representantes, los mercados lo interpretarán como un fracaso y un signo de que no podrán aprobar la reforma del impuesto de sociedades o el gasto en infraestructuras con la rapidez que hubiera gustado a los inversores. Se espera que el presidente Donald Trump se reúna con miembros del House Freedom Caucus (el ala más conservadora de los Republicanos) antes de la votación para iniciar negociaciones de última hora y conseguir su apoyo. Las habilidades negociadoras de las que tanto alardea Trump se pondrán hoy a prueba. Se desconoce la hora exacta de la votación, y puede que se lleve a cabo después del cierre de mercado de hoy, pero es muy posible que tengamos indicios claros de cómo se desarrollará la votación después de la reunión de Trump.
En lo referente a las noticias económicas, el último informe de peticiones de desempleo nos sorprendió con un titular negativo. Las peticiones iniciales para la semana que acabó el 18 de marzo aumentaron en 15.000, hasta 258.000 (consenso 239.000). Las peticiones existentes para la semana que acabó el 11 de marzo, no obstante, bajaron en 39.000, hasta los 2 millones. Aunque las peticiones iniciales se han mantenido por debajo de 300.000, la tendencia negativa podría señalar alguna debilidad potencial en el informe de empleo de marzo.
El informe de ventas de viviendas nuevas de febrero (consenso 560.000) se publicará a las 10 h (hora del este de los EE. UU.).